Hoy se cumplen dos meses de mi operación, no puedo creerlo, la vuelta a la oficina fue tan de sopetón que ya ni me acuerdo de mis 45 días de licencia regaloneada y descansada.
Igual llegué con más ánimo y debo admitir que fueron vacaciones, porque ni supe de pega esos días.
Tuve control el martes pasado y al doc no le gustó cómo lucen mis cicatrices, pero lo más importante fue que el pie derecho está más porfiado. El dedo gordo no tiene la movilidad que tiene el izquierdo. Qué heavy! me operé porque me dolía el izquierdo y ahora operada me duele el derecho.... Ay Señor!
Le conté que estaba haciendo Pilates, donde realizo algunos ejercicios en punta de pies, pero hay otros que por temor paso de largo. Me indicó que empezara a trotar y el viernes me subí a una trotadora: caminé 5 minutos a velocidad 4,5 y luego llegué a nivel 7, trotando, casi corriendo por unos diez minutos más y no tuve dolor. Quizás una pequeña molestia.
Me devuelvo caminando todos los días a mi casa, demoro unos 35 minutos. Me falta masajear más los pies, cada vez que pueda, subiendo y bajando el dedo gordo, como dijo el doc: "debo aumentar el rango".
Tengo que ir a un nuevo control en un mes más.